Espera, preséntate
Cesa, cesa de vestirte de gala para bailar tan sólo con los fotones y electrónes que mi cigarro abandona, deja de ser quién marque el número que no contestaré más, deja de ir dando vueltas de treinta y un grados encontrando la espalda de quién fuma un cigarrillo bajo la lluvia de la tarde, que con el cielo gris y tu transparente densidad el vacío es en mi centro.
Te vi, estabas topandote el ausente saludo y una amistad lejana. Cesa, cesa, que con tus gritos mueren millones de siglos empobrecidos de sangre. Deja de derrumbar los cimientos que otras ilusiones construyen.
Cesa, cesa vuélvete calma y escucha.
La Guerra
La llama que abrasa escurre de tu boca y escupes.
Las flamas que ciñen ahogan.
Has quemado muchas pieles y también muchas palabras.
He visto la casa donde moras volcarse por gritos... Son los invitados que han sido estafados... Pues les has quitado lo que en ellos has reconocido tuyo.
Tu casa que miro y parece de hierro, de hielo... el color es tan vago... He presenciado fantasmas que cruzan tu estancia, fantasmas negros que buscan el jardín que enterraste... Y que en las tarde sales a buscar porque tu deseas también descansar, pero ¿qué haces con minas, con eter, con picos y mazos, con escupitajos y gas?...
He interrumpido mucho tiempo mis lecturas porque no sé que impreciso punto hizo que fueses mi fronterizo límite... Tan fácil que es correr las percianas, cerrar la ventana, subir el volumen de la música o mejor apagarlo y volver al ensayo de Destierro...
Mi fronterizo límite:
No me basta con tu pútrida convicción personal haciendo mal uso de la mejor ley: La paz
Arribo
El jueves por la noche tuve una excelente Bienvenida a un Mundo de fantásticos seres, con ciudades de diferentes conciertos, pedí dar una caminata nocturna antes de entrar al palacio de los Magos transparentes, y quién se propuso como guía fué el 'Adolecente eterno', un personaje que despúes vendrá a visitarme (lo prometió), tiene el rostro agudo, no sé como puedo explícar sus facciones de un adolecente efectivamente, tiene un cuerpo de adulto, exhalá una seguridad que sería que no la conocí a esa edad y después tampoco, los adolecentes por lo general escupen recelo por un poco de amor... En fin.
Mientras caminamos, pudo saber de mi vida en tan sólo unos minutos, por supuesto que me asombre; iba preguntarle que es necesario que sepa con explicaciones y no fué posible pues de pronto en la parada que hicimos en una esquina un sueño recuerrente me vino a la mente. Confundí todo, ese espacio, ese viento, la hora...el día. No podía ver más que una figura besandome lascivamente...
Boté ese recuerdo del sueño por que 'el Adolecente eterno' estaba alejandose...
No quiero que se vaya.
Pero caminó más de prisa, saltó algunos muros, cruzó varias azoteas pero al fin me dijo:—No hay nada que explícar, no tengo nada que hacer ahí, puedes seguir... ve, continúa... no me sigas a mí.Proseguí camindo trás él—Está bien. Quiero saber por qué no te regresas a esa esquina, yo en tu lugar ya hubiese vuelto, pero ahora no puedo quedarme.
Deseo contarte que me sentí de pronto la madre de ese ser, como que sentí que lo abandoba déjandele ir.Despues ande el rumbo de regreso al Palacio de los Magos transparentes, llegue con frío y dudas, me ofrecieron un te, no podía quitarme las imagenes de él y del sueño (¿por qué me salto en ese momento?)... la lluvia de esa noche hacía que el cielo se viera totalmente negro. No podía olvidar todo aquel escenario. Alguién dijo: Tiene mucho que no te veía.Alce la cabeza...Su mirada y su sonrisa... Por lo que decidí ir a ese Mundo.
Cuento para despertar
Era una niña... Ella
Que te cuento, creció pero su alma y su mente no.
Ahora está ahí sentadita, muy mona... con un buen pretendiente y con un amante viejo infantiloide
El 'buen pretendiente' es un niñito igual que ella, como lo que su mamá había deseado para ella misma y el anciano decrépito amante, era como su madre...
Ella, está ahí ahora, en el asiento de copiloto.
En la balsa sobre cieno.
En la portada de la revista que vende lo que esta de moda, en el lugar de la vida que siempre está ocupado...
Nunca ha cambiado... la misma cara, la misma manos, las mismas palabras... los mismos pretextos, ruídos, llantos...
—¡Qué cuento tan bestialmente aburrido, eh!—entonces cuentame ahora tú
Coraje
//Cen
//sur
//a
El camino está plagado de ()... ¡No temas!, ellos estan atados a la vida como la soga al cuello de aquel que se deja vencer () y quiere encima ser recordado como un heróe, pero de tan sólo ver el espectro que con tono cómico osila en pequeños círculos entre el aire putrefacto... te () de la risa...
Ahora me ví en medio de la tormenta y una neblina generada con el humor de no sé que () corazón () inhundo la calle y casí me vuelco.
—Quisé escribir algunas letras anonymus
—eso es demasiado...
—sí, lo sé
—¿entonces...?
—Sí, sé como se llama (); ha cubierto la atmosfera a hedor de cocina barata... Aún así, me sorprendo mi proceder, quisé adueñarme de su instinto y representar la escena de su espectacular situación, quisé decirle sin decir ''mirá todos te botarán''... no se dió cuenta y argumento una idea demasido clicheada, apeló a mi poca paciencia que tengo ante éstos (), que mil veces he botado con una patada en el ().
Yo no soy actriz.
Una sonrisa
Quisé desde siempre colocar debajo de éste siglo la palabra: Color.
Así, extenderla como si fuese una ola que despues de caer del cielo entero al suelo de todos los sueños estancados y quizá como agua se filtrara por todos los escondrijos grises de las palabras arcaicas...
LLama
Es de noche, tibio el ámbiente, me ha costado seis cigarros y tres vasos de agua recuperar la fuerza para asir la daga y partir el deseo de ver girar el mundo una vuelta y entonces estés frente a mí. Sonidos antagónicos que invitan a quedarme un momento más entre los apuntes, ante los escombros del sonido bajo.
Así quedito, escuchando el llamado
— ¿Estás sola?
Día domingo
9 o 10 de Julio de hace un año, eran las 1900 hrs aproximadamente, la calle solitaria, el viento no había acudido como suele hacerlo en los atardeceres, ni una brisa por emisaria... nada de hojas crujiendo, nada de bolsas de plástico volando con poesía abandonada, estaba a punto de caer el sol definitivamente de ése día, el niño que siempre solo va en su bicicleta, había dejado ya su Adios de despedida desde hacía ya un buen rato... No había ni por que patear el bote de refresco ni por que mirar a los árboles para desvestirlos y encontrar la imagen de algún ser humano que te estuviese buscando... Así sin ningún preámbulo, de la esquina dobló aquella figura humaoíde, trastabillando,una de sus manos sobre la pared, parecían querer desifrar los grafittis, pero su mirada al suelo, observando donde caían sus pasos, la mano izquierda sobre el estómago...
Me acerqué, esa figura no emergía de ningún árbol, esa figura era más cercano a un ser golpeado con el puño de la abstracción, con la fuerza de la máquina productora de culpas... golpeado en la cabeza con la caldera colosal de las víctimas voluntarias. Le pregunte ¿necesitas ayuda?. Su mirada fría y perdida quebró la consistencia que yo era en ese instante, entonces ofrecí disculpas y volteé a continuar mi camino.
Palomazo... de puro dolor
Hay algo de verdad en esta tonada: Todo lo que sabe duele.
Bueno sí, también me encantaría sentarme frente al monitor dirigir la mirada al teclado y accionar el abecedario ... y llorar...
Cómo apenas ví una noche de otro ser, su arrebato de palabras cosechadas, acechadoras... como antorchas que se encienden sobre todo por las madrugadas...
Pero hace tiempo que intento dejar esas horas y hacerlas más espacio. Las lágrimas que me toman por sorpresa lo hacen entre gente que no, tampoco usa el kareoke.
¿Quién tiene la premisa?
Qué sin darte cuenta has tenido encima
la sombra de lo que no ves
las carcajadas de lo que no juegas
los añicos de lo que no destruyes...
El tiempo de prisa está
el cansancio de la mentira...
y el guión del día...—No, tampoco hoy cantaré, no.
Sílabas
Una frágil pronunciación de tu nombre
y no el rugído de la desconfianza
Una fría belleza de nieve,
y no el cuadro del juego enfermo en la pared;
tampoco la forzada sonrisa en nuestras caras,
si lo que quieres es callar
Una a una...
pronunciando lentamente
una a una...