Conjuntos A, B y C
a
Y escribo:
Recomendaciones, no.
Críticas, menos
Burlas, no gracias
El record de mi día anterior, demasiada lógica. Ya.
b
—No tienes idea de lo que daría por verte reir, D
c
a A le cortarían el cabello a condición de que no le pusieran gel, eso fue curioso porque A sentía lo incómodo de éste, pero en lo que acordaba que prefería que le cortarán, A moldeaba un montón de peinados pero se moría de la risa. Después disponían todo para ejecutar el acuerdo: el sillón de peluquero, de esos clásicos, la bata del peluquero, el peluquero, un lejo antiguo en el rostro del peluquero, A lo inspeccionaba todo de pies a cabeza pero no sé por que diablos sentía desconfianza de él... Juntando los círculos lógicos, el paluquero resultaba ser el marido de B, B tenía una hija: C. El peluquero se parecía a C.
Sólo faltas tú en la foto
Claroscuro:Director Scott Hicks, actor (Geoffrey Rush), la historia del pianista David Helfgott. En ésta escena David tocá una rola de Rachmaninoff que resulta bellisimo. Las tomas, la luz, la expresión...
Te dorado
Sin fuerza, como si despues de una caminata larga, larga...
Con el sudor pegando sus cabellos en la cara, como un rostro desencajado y la sensación en la boca de agrio y sal
Hizó un esfuerzo descomunal por llegar a la cama, se recosto con el cuerpo molido, con la ropa del trabajo, apenas pudo quitarse el sombrero, se envolvió entre las sabanas de manta azules.
La tarde fría y gris... Buenas sugerencias para irse con ellos ¿a dónde... Si el viento está en reposo también, a dónde... Si las sensaciones de hielo te acusan siempre, a dónde.... ?
En eso llego el león que dorado lo cego por unos instantes, llegó brincando la ventana se colocó a los pies de la cama y preguntó:
—¿quieres te?
—¿te?
Lleva un antifaz, puede ser un enigma a resolver...
Anguien ha dejado una invitación y se ha marchado sin dejar nombre.
''Alguien muy perecida a ella está en la siguiente habitación, ¿quién es?''
Alguien lleva acabo un juego de 'eliga la continuación de la historia'. Se ha perdido, el juego lo llevo a la azotea y no pudo detenerse cuando el juego marcó inciso 'c' : 'caída'.
Alguien ha cerrado la ventana al otro lado de la calle pues desde hace unos días no tolera el ruído de lamentos y punzadas de picos cabando el piso del vecino.
Alguien que lleva un título incuestionable lo ha tirado al pantano, el viento baja de la torre y yo busco la cabeza que rodando está del nobilisimo personaje, el titulo es lo que menos me imoporta ya...
Alguien que podría amarte demasiado... Ha pasado junto a tí y ha dejado la fragancia que por segundos aligera tus pulmones y que luego te recuerda ir trás ese aliento.
La fuente de los deseos: Todo al revés
Tan reventado el contenedor, ha estado expuesto al clima... una nube que tiene el número trescientos treinta tan sólo dejo caer una llovizna, el balde se resquebrajó y se desplomó; el cielo corría y yo contando las nubes, hay muchos seres sobre ellas haciendose el amor.
Trozos que levanto para pegar, pienso en las nubes que van solas o con un solo ser ¿Qué hace la soledad allá?, algunos parecían felices y emocionados jugando con los alados pardos otros contando los baldes que sostienen sus lagrimas...
''Hace tiempo que que vengo pensando dejar todo, quizá sea lo mejor...''
¡Bah, palabras!
Esos pedazos tienen mucho de lo que significa la nada dando vueltas, sí muchas partículas que hacen la nada...
Engomando estas piezas...
El número de las nubes está en tu caligrafía, desde hace rato que lo he dejado ahí.
Ya está el balde recostruído.
¿Todo seguirá igual?
A mí me entristece que algunos no puedan dar un paseo sin caer y caer justo en el patio donde está lista mi fuente que recicla la lluvia.
'casi despedida'
Fui al cosmos colindante, el que esta a una década de este tu mundo y el mío y el kairos de allí me dijo la edad de las visiones que están en mi imaginación cuando por las noches, reviso las letras de estas canciones que me he dejado de tarea entender, cuando he dejado los vicios en la puerta de la calle... Porque aquí son asequibles, el tormento de las ojeras y su sequía se lanzan a mis manos y es entonces cuando comprendo las letras que pretendo aprender de memoria para que en el momento de marchar sobre los balcones de las arterias de esta ciudad tuya y mía no me haga falta recordar que tú estas no sé donde y yo aquí que tampoco atino sobre el atlas de este firmamento a veces tan frío.
Gota y ciclón
Hoy la lluvia fue muy distinta a muchas que sólo empozan el pasillo de la estación de metro.
Guarde mi álbum de fotos en una bolsa de plástico que me obsequiaron para que no se humedecieran los instantes que han estado conmigo haciendo oxigeno y a veces poniente.
Afuera estaba la lluvia… cantaban tan diferente sus gotas, venían como en esplendida pasarela pero sin alfombra roja, no. Se cimbraba el suelo con ese ritmo tan puntual… no era gota a gota, no.
Salí con el álbum bajo mi brazo, no corrí, no. Mis botas dejaban con cuidado la huella que se iba tan rápido, aumente la presión pero era inútil, el tiempo estaba dejando sus segundos yuxtapuesto a mi paso. No lucharé más contra ello, no.
A esa batalla la pude retratar en diversos encuadres, la lluvia tenía como aliado al relámpago… la lluvia tenía como defensa al tiempo, lanzaban horas, meses, años. Y yo bajo ella… Pero no corrí, no
Canción
El despertar en tí
Porque has caído y arinconaste los vidrios rotos con tu cuerpo
concatenando los rumbos que deslizaron los brillos a no sé cuantas direcciones
escondediendo las ecuaciones
sólo mostraste el arcoiris
llendo despacio
con los ritmos que son
internos
De rodillas si gritas
y si sales por la puerta de emergencia
encontrarás las mismas caras de tu alrededor que acuden a 'salverte'
robandote
Pero ahora no fue así
Tú no quieres dar el paso atrás
y sucedió que cuando los signos se viertieron en tí de tí
casi no percibías el andar que te está llevando muy cerca de mí
El necio que se pone tu ropa: el que la roba
el pobre que deja a aquel vivir mientras chantajea
y tú saliendo por la puerta de emergencia gritas el odio que tienes
color marrón
y sales... a buscar una copa de vino barato
o
una
sonrisa fresca para comer.
Por que has gritado el odio color marrón,
tienes mucha hambre de compresión
Los apuntes
Tres capítulos fugaces, dos escondidos y uno a medias. Intente reconstruir algunas, ahora lagunas entumidas, que hace unos minutos eran las estrepitosas disculpas de un día sin abismos.
Me reí cuatro veces de la provocación insidiosa de quién no pude hablar otro lenguaje que atisbos de furia.
Celoso margen que me come los pies.
Día a día prendo una oración para caminar en paz, pero el asfalto está demasiado sucio, se sube por las bardas y a los negocios los enegrece y tan sólo puedes adquirir un boleto de transporte que te lleva a la coladera de los insomnes huecos, ahí hay humor vitreo calcinado.
En el trayecto busco los títulos que podrían hacer llegar a la parada, podría accionar el timbre y bajar, bajar, bajar… ¿Quién lee a estas horas, cuándo las líneas de los párrafos también succionan el desvariante sueño?
Encontré un anuncio que presagiaba tus pensamientos en una libreta.
No había prototipos de seres modelos, no había olvidos, ni apócrifas ilusiones, Así que ahora tengo más azul entre mis ojos y los tuyos.